sábado, 7 de abril de 2012

La buena tierra que vamos a poseer



Deuteronomio 8:2
Deuteronomio 8:7
Deuteronomio 8:10
Deuteronomio 8:11
 Mi Dios siempre ha permitido que comparta esta promesa con las personas cuando serán llevadas a otro nivel de vida, cuando dejaran sus vidas de angustias y necesidades y entraran a gozar de bendiciones, fruto de haberse determinado a seguirle a Dios, esta cosecha de regalos del cielo llegará a las personas que nos hemos mantenido firmes en la obra de El, a pesar de las adversidades, cuando seamos introducido a la tierra que fluye leche y miel, nos daremos cuenta que era solo una prueba para saber lo que había en nuestro corazón.

Si tu has permanecido fiel, has predicado el evangelio o sea has cumplido con la Gran Comisión y has confiado a sus promesas, Te cuento que pronto serás introducido a una nueva vida, una vida de sanidad del cuerpo, libertad financiera, bendición emocional, ministerial, etc,  en general de deseos cumplidos, pero esta promesa también trae una advertencia que cuando estemos disfrutando de las bendiciones no nos olvidemos de Dios, que cuando lo malo haya pasado y sea como un sueño, nunca se nos olvide y entendamos que fue la misericordia del Señor la que permitió que obtuviéramos esos regalos, y que si vemos a otros pasando el proceso que a nosotros nos tocó vivir, no seamos indolentes sino tener compasión y darle la mano como otros hicieron con nosotros.

Ahora simplemente disfruta de esas puertas abiertas, de todo lo bueno que vendrá y te recomiendo mucha sabiduría  a la hora de actuar en tu nueva libertad financiera, o sanidad física etc.,. .
No olvides nunca la lealtad con las personas que te acompañaron durante este largo, y desagradable tiempo de prueba o que yo llamo: una oportunidad para tener un gran crecimiento personal y espiritual.

Nota: La llave de la imagen es algo representativo de cuando estemos recibiendo nuestra bendición, ya sea en cualquier área; económica(financiera), física(buena salud),familiar, sentimental, ministerial, o intelectual(estudios)

Atentamente,

Lucelly
Deutoronomio 28:1-14

Muchas bendiciones y que recibamos lo que yo llamo regalos del cielo, y grandes bendiciones, que
cuando los recibamos nos coloquemos de rodillas ante Jesús en señal de agradecimiento.
En el nombre del Señor Jesús te doy gracias Dios, por dejarnos entender estos tiempos y por no habernos soltado de tu mano, y Gracias Espíritu Santo por tu guía.

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